Menuda lealtad

Parece que aquello que dijo Arenas de que el traspaso de poderes se llevaría a cabo con la máxima lealtad institucional se ha olvidado ya. Después de la desclasificación de algunos documentos del CNI, que no consultaron con Zapatero, ahora el gobierno en funciones adjudica contratos del trasvase del Ebro por valor de 82 millones de euros, sabiendo que el gobierno socialista quiere paralizar esta obra. Si hubieran puesto un 10% del esfuerzo que hizo Aznar para forzar que Zapatero se pronunciara sobre el relevo de las tropas de Irak en retrasar la publicación en el BOE de estos contratos, dentro de unos meses el Gobierno no tendría que pagar unas indemnizaciones millonarias a las empresas adjudicatarias. Un dinero de todos, por cierto.