Desafíos

Cuando hacemos un órdago en la mayor parte de las ocasiones no queremos que nos lo tomen en serio. Es decir, nunca quise que dejara de llamarme ni que durante tanto tiempo haya estado alejado de mí. Pensé que volvería para suplicarme, para mentirme una vez más y prometerme que la dejaría. Lo ha hecho tantas veces que es parte del juego, del suyo y del mío.

3 comentarios

[jcdenton - 06 de mayo de 2004 - 09:02]

no, parece complicado pero puedes hacerlo.

se que será una guerra contra él dejarle y tratar de olvidarle. que él podrá entrar en tu vida cuando quiera y tu sentirás que le necesitas pero si quieres acabar con este pesar tienes que dejarle ¡pq él casi te está utilizando!

un ultimatum y si no la deja a ella, lo dejas tú a él.
Y evítale. ¿Que no te deja? Patada en los oo, insúltale, ruégale que te deje en paz de una vez.

¿Es tu jefe o tu trabajo depende de él?

es que no veo donde está el problema a parte de tu necesidad hacia él que deberías evitar aunque sea con dolor y lágrimas

[laotra - 05 de mayo de 2004 - 20:57]

Es un más complicado de lo que parece. En todo caso, gracias. Seguiré contando cómo va esta otra vida.

[jcdenton - 05 de mayo de 2004 - 17:41]

Tómatelo en serio y olvídale de una vez. ¿El mejor modo? Cambiar algo tu vida: búsca "a otro" que aunque no le sustituya, quizás te devuelva la ilusión y te de lo que él te daba.

Perdona si opino sobre tu vida privada. Se que solo conozco lo poco que leo y supongo de tus palabras pero ya que lo haces público, me gustaría aconsejarte.

Ojalá esta vez el órdago sea de verdad. No aceptes sus mentiras y sus promesas.

un saludo afectivo